Las enfermeras nos dedicamos a cuidar personas, no a la tecnología. Pero no debemos obviar que el primer lugar donde consultan los pacientes es la red. Y aquí viene el “quid de la cuestión”: Nadie mejor que nosotras puede dar respuesta a esa demanda de información.
Tenemos que estar presentes en las redes aportando recursos de calidad. Basados en nuestro conocimiento como profesión y dando respuestas a sus problemas de salud. Si no lo hacemos, daremos vía libre a toda clase de bulos y fake news.
Debemos adquirir habilidades en la búsqueda y curación de contenidos. Aprender donde encontrar información fiable. Huir de todo aquello que no esté basado en la evidencia. La tecnología es una herramienta que nos ayuda a mejorar en nuestra profesión. Pero nunca debemos perder de vista nuestro objetivo principal: Las personas.